Supremacistas blancos esperaban encender la “guerra racial” atacando las redes eléctricas

Tres hombres se declararon ayer culpables de conspiración para proporcionar apoyo material a terroristas por su papel en un complot de supremacía blanca para atacar las redes eléctricas de Estados Unidos.

“Estos tres acusados admitieron haber participado en un inquietante complot, en apoyo de la ideología de la supremacía blanca, para atacar instalaciones energéticas con el fin de dañar la economía y avivar la división en nuestro país”, aseguró el Fiscal General Adjunto para la Seguridad Nacional, Matthew Olsen, en un “anuncio” del Departamento de Justicia.

Los acusados son Christopher Brenner Cook, de 20 años, de Columbus, Ohio; Jonathan Allen Frost, de 24 años, de West Lafayette, Indiana, y de Katy, Texas; y Jackson Matthew Sawall, de 22 años, de Oshkosh, Wisconsin. Fueron acusados en el Tribunal de Distrito de EE.UU. para el Distrito Sur de Ohio y se enfrentan a penas de prisión máximas de 15 años. Los acuerdos de culpabilidad recomiendan una libertad supervisada posterior a la prisión de 30 años con vigilancia informática y la prohibición de utilizar “plataformas de comunicación encriptada en línea”.

“Como parte de la conspiración, a cada acusado se le asignó una subestación en una región diferente de los Estados Unidos”, mencionó el Departamento de Justicia. “El plan consistía en atacar las subestaciones, o redes eléctricas, con potentes rifles. Los acusados creían que su plan costaría al gobierno millones de dólares y causaría malestar a los estadounidenses de la región”.

Esperanza de una “guerra racial”

Una declaración de hechos que los acusados admitieron en sus acuerdos de culpabilidad describía su esperanza de encender una “guerra racial”:

Además, los acusados creían que el tiempo asociado a la sustitución de las subestaciones causaría confusión y malestar a los estadounidenses de la región. También se habló de que la posibilidad de que la electricidad estuviera cortada durante muchos meses podría causar algún cambio serio o directamente una guerra, incluso una guerra racial; además, que sin electricidad en todo el país, podría causar la próxima Gran Depresión, la gente no iría a trabajar, la economía podría hundirse y habría una oportunidad madura para que se alzaran posibles líderes (blancos). Un tema de las discusiones del grupo se centró en la necesidad de crear desorden para derribar el sistema, lo que haría que la gente dudara del sistema y creara una verdadera fuerza revolucionaria contra el sistema.

La planificación de los atentados se produjo entre octubre de 2019 y marzo de 2020, según la exposición de los hechos. Frost y Cook se reunieron en un grupo de chat en línea en el que Frost “compartió la idea de atacar una red eléctrica, un objetivo percibido como vulnerable”, y “proporcionó a Cook información que había reunido sobre posibles redes eléctricas como objetivos”, dice el documento. Los acusados planeaban utilizar “potentes rifles que penetrarían en los transformadores”.

Los hombres procedieron, con Frost centrándose en la logística y Cook manejando el reclutamiento:

Como parte del proceso de reclutamiento, Cook a menudo hacía muchas preguntas literarias; Cook incluso hizo circular una lista de libros de lectura sugerida, si no obligatoria, que promovía la ideología de la supremacía blanca y el neonazismo, incluyendo títulos como “A Squire’s Trial” y “Siege”. “Siege” hace hincapié en la obtención del poder a través de la violencia, en contraposición a los medios políticos. Cook también buscó reclutas que fueran más jóvenes, creyendo que era menos probable que los individuos fueran miembros de las fuerzas del orden.

Los esfuerzos de reclutamiento de Cook se centraron principalmente en los jóvenes, dice el documento.

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