El aire acondicionado representa ya una parte enorme del consumo total de energía en los países de clima cálido. No sólo es una carga para el medio ambiente, sino también un golpe económico para el bolsillo. Es un problema que impulsó a la arquitecta e investigadora Marwa Dabaieh a desarrollar un sistema de refrigeración ecológica.
En Egipto, donde Dabaieh probó su sistema de refrigeración, el aire acondicionado es la norma. Su adquisición y funcionamiento son muy caros, sobre todo cuando funciona con electricidad. Otro problema en estos países es que muchos residentes viven fuera de la red eléctrica.
La necesidad de sistemas de refrigeración también aumentará en los países hasta ahora más fríos, ya que las olas de calor son cada vez más frecuentes.
Como experto en arquitectura sostenible y respetuosa con el medio ambiente, la innovación de Dabaieh se basa en un concepto de “hágalo usted mismo”. La construcción, con la ayuda de los tradicionales “embudos de shisha”, está hecha de arcilla y mejorará tanto la temperatura como la humedad interior de las viviendas.
Combinando los embudos de arcilla, el agua y el poder natural del sol y el viento, el objetivo es reducir la temperatura interior en diez grados. Eso podría significar pasar de 35 a 25 grados centígrados en el interior, durante un día especialmente caluroso. Sus intentos experimentales hasta ahora han sido prometedores. En un artículo científico publicado recientemente, Dabaieh presenta una reducción de la temperatura interior de dos grados durante un experimento en El Cairo. Desde entonces, ha logrado una reducción de seis grados.
Las altas temperaturas en interiores son un riesgo para la salud que puede tener graves consecuencias tanto para la salud mental como física. Esto se observó en Suecia en la primavera y el verano de 2018, que fueron de los más cálidos de la historia moderna. El exceso de mortalidad en comparación con veranos anteriores fue de 700 muertes, según la Agencia de Salud Pública de Suecia. Aunque no es posible saber con certeza qué muertes se debieron al calor, se observó que la tasa de mortalidad fue más alta durante las semanas más calurosas.
Las altas temperaturas también afectan a la atención y la concentración, lo que no es bueno ni para la economía ni para la sociedad, dice Dabaieh. Como consecuencia natural, el aire acondicionado es cada vez más común. Sin embargo, el precio de la electricidad también es un factor en Suecia.
“Algunas personas, como los pensionistas, los parados y los refugiados, no pueden permitirse el aire acondicionado. Esto supone que la mortalidad corre el riesgo de aumentar cuando las olas de calor son más frecuentes. Es trágico que esto ocurra cuando podría resolverse estando mejor preparados”, afirma Dabaieh.
El siguiente paso es continuar con el desarrollo del sistema de refrigeración sostenible y pasivo.
“La arcilla no es cara, lo que hace que el precio de la construcción sea asequible, pero sí lo es el desarrollo del método”, dice Dabaieh.
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Alberto Berrios
Escribo sobre productos relacionados con el audio desde pequeños altavoces inalámbricos hasta grandes sistemas Hi-Fi. No comparo estos productos con otros, sino que muestro los puntos fuertes y débiles de cada dispositivo separado. Si quieres saber si un determinado producto merece la pena, ¡consulta una de mis reseñas antes de hacer la compra! Gracias por leer, hasta la próxima.
